La alzapúa, una técnica que personifica el sonido flamenco, emplea las pulsaciones del pulgar para dar a los pasajes de la melodía una síncopa rítmica y pulsante con su patrón rápido y repetitivo de tres pulsaciones diferentes. La alzapúa, que toma su nombre del verbo español "alzar", significa "levantar" o "elevar", y se emplea en muchos toques diferentes.
Conocida hoy en día como una técnica que muestra las habilidades de un virtuoso, la alzapúa tiene sus raíces en el pasado antiguo. Técnicas similares se han utilizado durante siglos en la música compuesta para el 'ud islámico, un instrumento antiguo que forma parte del pedigrí de la guitarra moderna. El uso de las pulsaciones del pulgar hacia arriba tiene una larga historia de uso en la música flamenca. Los guitarristas empleaban esta técnica para tocar tanto el rasgueo como las ejecuciones de una sola nota, en este último caso utilizando la uña del pulgar como plectro.
Empieza a aprender esta poderosa técnica para dar un ritmo vivo a tu música. Toca los golpes en este orden:
1. Con el pulgar, toque un acorde descendente en todas las cuerdas, utilizando como punto de partida una nota bien definida en la melodía, que será la nota más grave e importante del acorde. La extensión del acorde a las cuerdas superiores es opcional. Normalmente, los guitarristas tocan un golpe al mismo tiempo que tocan la pulsación del pulgar. Por ejemplo:
2. A continuación, toca un potente golpe ascendente en el mismo acorde, utilizando el borde de la uña para golpear todas las cuerdas del acorde. Este es el ingrediente clave que dará a tu ritmo su síncopa distintiva, así como una sensación de urgencia. Una vez más, la extensión del golpe no es tan crucial como la forma de golpear las cuerdas, ya que el golpe ascendente no forma parte de la melodía.
3. Por último, toca una nota melódica en una cuerda del bajo, utilizando un apoyando firme. Utiliza la misma cuerda que quieres usar en el siguiente apoyando, o, alternativamente, en la siguiente cuerda más baja. Si utiliza la siguiente cuerda más baja, pase el pulgar para hacer sonar la siguiente nota, con un seguimiento suave después de tocar la nota melódica. Mantenga la mano derecha en la posición del pulgar, mostrada anteriormente en la segunda lección. Mueva el pulgar desde la articulación donde se une a la muñeca. Basa los movimientos de los dedos de la mano izquierda en las posiciones de los acordes que se utilizan en la pieza, y mantén las posiciones de los acordes con algunos de tus dedos, utilizando los otros para detener las notas de la melodía.